“COMPETENCIA CULTURAL EN EL CUIDADO MÉDICO”
Por: Dra. Sharon I. Caballero Lam
Médico Residente de Psiquiatría
Nuestro país, desde nuestros inicios como nación, se ha caracterizado por ser un crisol de razas, alojando en nuestro hermoso istmo a cientos de personas de otras nacionalidades, culturas, tradiciones, religiones, de distinto color de piel, que a lo largo de la historia han jugado un papel importante en la evolución de la cultura del panameño actual. Ya que nuestra cultura ha adoptado algunos de esos patrones culturales no autóctonos, pienso, que para el enriquecimiento de nuestra cultura panameña, sin olvidar nuestras verdaderas raíces y tradiciones, lo que fomenta una mejor convivencia.
De igual manera sucede en lo referente a la visión que tiene la persona de la enfermedad, en donde, es la cultura más que cualquier otro aspecto, quien influye de manera profunda en el cuidado de la salud. Las normas y valores culturales influyen en la manera como el paciente experimenta la enfermedad, busca cuidados de salud y acepta o no las intervenciones médicas.
Desde ese punto de vista, es el sistema de salud panameño quien debe asegurarse que cada profesional de la salud esté preparado al momento de abordar a cualquier panameño tanto del interior del país como de la capital, sea o no extranjero. En nuestros hospitales vemos con mucha frecuencia como se brinda atención médica de todo tipo a pacientes extranjeros, muchas de esas veces con la ayuda de la embajada de su país.
Es importante para los jóvenes médicos estar capacitados cuando algún paciente nos diga: “tengo un viento”,” creo que me ojearon”, “estoy empachaó”, etc., ya que de eso dependerá el éxito de la relación médico –paciente y a su vez el tratamiento y pronóstico. En nuestra formación como médicos internos, nuestro segundo año lo pasamos en el interior del país, a mi juicio una enrique-cedora experiencia que nos pone en contacto con las necesidades de la población, recuerdo con alegría las giras de salud a comunidades muy apartadas y queridas, como Chiguirí Arriba, Coclé del Norte, San Miguel Centro; comunidades casi inaccesibles, a las que sólo podíamos llegar en lancha o a caballo en una parte del camino, luego caminar horas bajo la lluvia y el lodo hasta tus rodillas, para llevar un poco de alivio a esas familias que ponen sus esperanzas en el Médico, aunque llegáramos hasta allá con escasos insumos médicos, pero con un gran entusiasmo y humanismo.
Estas experiencias enriquecen la formación del médico y crean competencia cultural en ellos, lo que hace que tengan más empatía al momento de relacionarse con el paciente y sus familiares. Lo que redunda en beneficio de la comunidad misma. Nunca olvidar que respetando la cultura, estamos respetando la dignidad y creencias del individuo.
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